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A veces creo que el mundo se me viene encima, unas veces resulta ser todo un mal entendido, como hoy, las cosas fueron tan livianas cuando entendí el significado de lo real.. cuando vi la realidad y la enfrenté.. eso es lo que puedo decir, la vida no es la misma si no le damos la cara, si no la miramos de frente, las cosas nunca son tan feas como creemos, porque hay un amigo que siempre está con nosotros, y Él nunca permitirá un golpe tan fuerte en nuestras vidas sin razón, las cosas tienen un sentido y un porqué no pasan así como de la nada.. y cuando es así doy fe de que es un mal entendido.. la vida, creo, es mucho más simple de lo que la vivo, las cosas se dan cuando deben, y se quitan cuando deben, el problema es entenderlo así cuando uno está viviéndola, es tan fácil llenarse la boca con palabras, llenarse la cabeza de pensamientos, y el corazón de sentimientos, pero tan difícil actuar, y enfrentar. Porque así uno cree que la vida la tiene en sus manos, que está todo controlado y de pronto paf algo ocurre, y es algo tan simple, pero el sólo hecho de derrumbarnos un plan ya formado, nos desconsuela y nos ahoga en un vaso de agua. La invitación es a vivir con la sencillez de un niño, y la astucia de un anciano, a disfrutar el hecho de existir, tener familia, amigos, un corazón y dos pulmones... el resto corre por cuenta de la casa :)